EL PARTIDO DE LA JORNADA.
Pintaba oscuro a mediados del primer acto con cuatro a uno en contra. Pero el segundo gol poco antes del descanso fue un anuncio, un buen presagio. En la reanudación se fueron arrimando al contrario en el marcador y distanciando en el buen juego, cuatro a tres. Siguieron con el plan de ayudas y esa tendencia solidaria les trasladó hasta el empate, premio al coraje mostrado en la segunda mitad. Dani dos veces, Ricard y David fueron los goleadores hasta entonces, el resto del equipo héroes a partes iguales. Las perspectivas de empate final se esfumaron cuando Álex lanzó un balón cargado de magia a la red, gol que repasaría orgullosamente durante toda la tarde-noche y que todos festejaron. Besos y guiños a repartir, al escudo y al cielo. El Alevín B había ganado a lo grande a uno de los líderes, Orgaz, por 4-5 con todo el derecho. Será cuestión de repetirlo más días.
PODERÍO NARANJA
Los tres Benjamines en la Liga de Campeones. Es la segunda vez que un club o escuela mete sus tres equipos entre los mejores. La primera también fue de Odelot. No hay que dar muchas explicaciones para revelar lo que esto significa si lo reducimos a una palabra tan simple como grandiosa: Trabajo. El Benjamín A asusta con sus números, el Benjamín B seguirá ofreciéndonos goles y alegrías, mientras el Benjamín C sobrepasó con creces su objetivo. Ahora sólo están obligados todos a disfrutar.
Los encuentros de Primera División contra el Toledo rescataron a los que más lo necesitaban. Vaya por delante que ninguno de los partidos fue lo mejor que hayamos visto estéticamente. En descargo de todos los protagonistas, apuntaremos que se hacen imposibles los controles cuando le das un buen balón al compañero y le llega una palangana, vamos, que vimos Duelos de Efectos Especiales. Éxito importante del Infantil B, al que se le puede acusar de todo menos de orgullo y carácter, baza fundamental para el 2-1 final. No era una urgencia extrema ganar pero si una necesidad para la autoestima de unos jugadores valientes, que no huyeron con excusas disimuladas, que pusieron lo que tenían, ambición, furia y talento, y eso les bastó. Muy grandes. Perdió el Cadete B, mermado por una expulsión en el minuto 14, sin excusas, pero con influencia, 2-3. Aun así, con diez, existieron, cercando a un rival al que se le hizo el final muy extenso. Cayó también del Alevín A, mismo resultado, quiso y no pudo, porque los verdes se cerraron bien y soportaron las aturdidas embestidas de la ansiedad, por intentar meter el tercer gol antes que el segundo. No hay alarmas, siguen siendo los mejores, con su colchón sereno de líder. En la Liga de Villaluenga también gobiernan, después de vencer 0-3 al Seseña CF.
Pues eso, Poderío.