INFANTIL A, CAMPEÓN REGIONAL
El triunfo mínimo vale, y se acrecienta cuando es ante un gran equipo. Examinado el partido de la Gran Final Regional Infantil, nuestro equipo demostró una prevalencia futbolística, una confirmación de superioridad física, artística y hasta ideológica. Eso define a un equipo fresco, competidor y resolutivo. Y muy táctico. El Infantil A es todo eso y más. Frescura es adaptarse a cualquier idea, competitivo es hallar la armonía conectada entre la fortaleza y la técnica, solvente es saber aprovechar cualquier resquicio. Lo táctico fue cosa de David Roncero, cual pescador experimentado, lanzó el anzuelo en el primer tiempo, y recogió, caña en mano, a su presa en el segundo. Es por eso por lo se han proclamado Campeones Regionales, tras ajustar las individualidades al sistema colectivo, y así vencer al Ciudad Real, con un apretado 1-0, suficiente para subir a lo más alto.
UN BLOQUE IMPARABLE
Ellos son por orden en la foto: Sierra, Marcos, Diego, César, Borja, Rubén Pagés, Alfonso, Pablo Blanco, Alberto, Pablo Pérez, Rodri, Álex, Suárez, Josiño, Kris, Edu, Alejandro Sevilla, Víctor, Iván, Yago, Hugo, Adrián, Fernando, Sergio Sevilla y Rubén López.
Ordenamos brevemente el partido. El sofocante calor no confundió a nuestro equipo, que supo entender que era cuestión de paciencia. Salió precavido, sin excesos físicos, consciente del tiempo, en hora y temperatura. El Ciudad Real arrancó como un tiro, encerró y dominó durante casi todo el primer acto, efecto intimidatorio que no enredó a los nuestros, que guardaron energía para la segunda parte. El ímpetu mostrado por el equipo manchego al principio se diluyó con la decisión, el control y el orden que expusieron los nuestros en el inicio del segundo acto.
Fue otro partido, igual de trepidante pero con otro guión muy diferente, en el que los naranjas se desataron, atacaron por todos lados, persiguiendo a su presa, presionando y ahogando su salida del balón, y aprovechando una excelente jugada de Alfonso y Pablo Pérez que puso un balón botando a la espalda de los centrales, y que controló y definió espléndidamente Diego Alcázar. Fue un gol que agitó a la grada calurosa, que no tuvo reparo en levantarse y romperse las manos hasta aplaudir. Sublime.
OTRA VEZ ELLOS
Otra vez el Prebenjamín A. Lo han vuelto a hacer. Otro trofeo a nuestras vitrinas, esta vez ha sido el logrado en la Soccer Junior Cup, tras vencer al Seseña A en la final por 1-3, habiendo ganado todos sus partidos, con un excelente juego, su juego, esa música celestial que a veces duerme rivales, o rockera que agita y remata a los contrarios. Unos cracks estos nenes.
Enhorabuena Campeones !!!
