Hablaremos de fútbol, como no podía ser de otra manera. Y de sus decorados. Pocos partidos que analizar, tan sólo cinco, pues todos los del Fútbol-7 no tuvieron jornada. El decorado en dos de ellos era blanco, por la escarcha producida por la helada de la noche. Vistos los terrenos de juego así, no invitaban a ver buenos partidos. Luego fueron los dos mejores partidos de los nuestros, eso sí, ayudados por el sol que se desperezó poco a poco, y por las pisadas de los jugadores. Una vez resucitado el color verde del terreno, apareció el fútbol. Y vimos el balón circular con fluidez entre piernas vestidas de naranja unas, de blanco otras. Las nuestras, las naranjas, eran las que más tocaban el balón. El Cadete B ganó el derby de la capital de Primera División, 0-3, ante el Toledo B, con más autoridad en el juego que en el marcador. Bien armado atrás, solidario en el medio y dinámico arriba, el equipo fue muy superior al rival. Todos merecen mención, aunque apuntaremos a Diego Burguillo, que metió dos goles, a Imanol, que marcó el otro, y sobre todo a los tres mediocentros, que acapararon toda la posesión del balón, Guillermo, Popi y el incombustible cuentakilómetros, Luis Heras. El Infantil A se llevó los tres puntos en Liga Regional, ganando apuradamente al Tomelloso, 1-0, gol de nuevo de Óscar. Al igual que el Cadete B, se encontró un terreno de juego helado. A los chicos casi nos costó sacarles a jugar, del calorcito del radiador a la pista de hielo. También una vez despejada la escarcha nocturna, vimos un gran partido, porque el Tomelloso se mostró muy bien organizado y colocado, con mucha disciplina defensiva, aunque sin llegada a nuestra área, cosa también que fue mérito nuestro, de los dos centrales, David y Álvaro, y los dos que se pegan con todo el mundo por recuperar un balón, Alex y Marcos.
Partido más gris, pero con mucho sol, fue el del Cadete A, que marcó muy pronto, a los dos minutos, gol de Dani el Rubio, que supo donde queda la altura del larguero, pues hasta tres veces remató al palo. El equipo sufrió mucho, porque el Tomelloso se mostró como buen equipo, duro y rocoso. El decorado del partido además no era bueno cuando estábamos por debajo en el marcador a falta de doce minutos, hasta que apareció Dani Muñoz para marcar el empate en una gran jugada personal de Dani López, que le puso el balón para el empate definitivo, 2-2. Cosas de Danis, ya veís. Duro correctivo para el Infantil B en Talavera, ante el San Prudencio, que nos metió un contundente 9-0. Si ya de por sí, contábamos con la enorme dificultad de jugar contra muy buen equipo, más formado físicamente, que iba líder y con un golaverage espectacular, luego nos encontramos un panorama peor, porque salimos demasiado acomplejados, y ya de antemano, derrotados. Hay que disfrutar y divertirse cuando juegas con algún equipo a priori débil, y saber sufrir cuando lo haces con un rival superior, pero nunca salir en huelga de brazos caídos. Venga, chicos, ánimo, que vais muy bien.
En un decorado más invernal si cabe todavía, jugó el Juvenil ante el Sonseca, cuarto clasificado. Al final hubo empate, 2-2, quizá lo justo, aunque por ocasiones merecimos ganar holgadamente. Diego López "Sala" volvió a su cita con el gol, y Riza marcó el otro. También cabe destacar que si no hubiera sido por la facilidad defensiva que les dimos en algunos momentos, pero no centrada en dos jugadores, sino en los once que estaban en el terreno de juego, habríamos ganado con total seguridad, pero adelantamos el dia de Papa Nöel, quizá confundidos porque el Sonseca vestía de rojo como él. El partido que hicimos en general fue bueno, y por méritos deberíamos haber ganado. Pero nada cambia, nosotros a lo nuestro, a seguir corrigiendo errores y mejorando virtudes. Viendo el frío que estamos pasando estos días para ver fútbol, solo nos queda pensar en la playa de cualquier lugar.