El equipo Infantil A, jugó un trofeo triangular en Carranque frente al Carranque y al Sagreño de Yuncler, y venció en sus dos partidos sin arrugarse el traje prácticamente. 6-0 al Sagreño y 1-0 al Carranque. Otra copita a la saca, y las que vendrán. Dani Ludeña recibió su recompensa en forma de trofeo al máximo goleador, lo que confirma que es un auténtico cazador de goles. Marcará muchos, ya vereis. Antes de estos partidos de infantiles, habiá pasado por Carranque un huracán de color naranja, que se hace llamar Cadete A, y que vapuleó a su adversario, el Carranque por 1-13. Ya, ya, podria alguien pensar que así serían los otros, pues no. Pensamos que así son estos, los nuestros, un torbellino de fuerza y fútbol. El Cadete B jugó en Fuensalida contra el equipo local, e hizo un partido malo, impreciso, lento y sin ritmo. Y aún así haciendo poco, le dió para ganar 0-1. No siempre será así, chicos, recordar que siempre es más fácil ganar si juegas bien. Mal día también el del Infantil B, que fue goleado en Mora 5-1 por un equipo mayor que ellos, pero que no es excusa para justificar un poco la desidia y la poca ambición mostrada por algunos jugadores. Tenemos que ir sacudiendonos ya la excusa de que si venimos del futbol 7, que si tal que si cual. Poneros las pilas ya, chavales. El Alevín A venció 0-3 en Mora en un buen partido. La dinámica debe ser ésta, la continuidad en el juego, porque no podemos dar una de cal y otra de arena. La senda del triunfo está marcada, solo teneis que seguirla. Animo. 0-2 perdió el Alevín B, contra el Patronato, porque no acertaron en las 17 ocasiones de gol del primer tiempo, y porque nos ganaron también la gripe y las lesiones, hasta cinco jugadores quedaron KO el sábado en el primer tiempo. El Alevín C ganó 3-0 al Fuensalida, en un buen partido de ritmo y juego. Cuando éste equipo está preciso en los pases, es difícil que pierda, porque la calidad está más que demostrada. Benjamín A y Benjamín C se pusieron de acuerdo en el resultado: 5-1 ganaron ante los Fuensalidas A y C sin pasar apuros, en partidos donde se mostraron tremendamente superiores a sus rivales. Cerramos la mañana del sábado ofreciendo el mayor espectáculo. Los Prebenjamines. Lo del A fue un partidazo, donde tuvieron un rival duro, de nivel, el Fuensalida, y al que superaron por 5-3, principalmente porque hicieron las cosas muy bien, a pesar de algún despiste defensivo, que les perdonamos por estar en la edad que están. Lo del B, fue otra cosa, fue fútbol de ilusión, ganaron 4-2 al Argés, pero el resultado no importa con estos nenes casi nunca. Importa y mucho el desarrollo de los partidos, ver sus caras cuando meten un gol, y cuando lo reciben, y sobre todo es reconfortante verles cuando acaban un partido, y han ganado, porque se les escapa la satisfacción por todos lados. Lo dicho, un espectáculo. Con el Juvenil Nacional podríamos haber estado hasta el domingo por la noche jugando contra el Zona 5, y seguramente hubierámos tenido 2756 ocasiones más de gol, pero no hubiéramos marcado. La suerte nos abandonó el sábado, bueno, mejor dicho, no nos ha acompañado en ésta temporada todavía. La seguimos esperando, porque sabemos que vendrá. En un partido en el que al menos tuvimos hasta ocho ocasiones claras de gol, incluido el penalty fallado en los últimos minutos, parece inverosímil que acabemos perdiendo. No pudimos hacer más. Esto sigue, así que chicos armaros de valor porque no dudamos de vuestra capacidad, pasará el temporal y volverá a lucir el sol de la victoria. 2-3 fue el resultado final, goles de Nakata y Diego. aunque lo justo hubiera sido un 7-3. El Juvenil Provincial venció 4-0 al Almoradiel, equipo bien apañado, bien colocado, pero que no pudo aguantar el empuje de los nuestros. La tarta nos la comimos en dos trozos, la mitad en el primer tiempo, dando tiempo suficiente en el descanso para hacer hueco en el estómago, la otra mitad en el segundo tiempo. Dos goles en cada período finiquitaron un partido muy bien jugado y elaborado por nuestros juves peques, que si gozan de la suerte de la que adolecen los otros. Tres goles de Fernando Villarejo, pequeño pero matón, del área claro, y uno de Cacho. Seguimos esperandote, amiga suerte.
