EL PARTIDO DE LA JORNADA.
Día de Reyes. La importancia de las finales se miden principalmente por lo que dan. Si ganas, premio. Si no ganas, mañana será. Pero nada borra la salida anterior al partido, donde los finalistas pueden presumir de ser los mejores. Lo conquistado en el III Torneo de Navidad de El Álamo para nuestra Escuela es Crédito fuera del Territorio Regional, ¡¡ CAMPEONES !!, tras subir a lo más alto, para recibir el aplauso merecido. El rival de Toni, de nuestro Benjamín “A” fue el Navalcarnero, el resultado 0-3, y la sensación general, excelente. Éstos nenes decidieron coger el AVE el Día de Reyes, entusiastas, Cabezas Felices y Pies Talentosos, renunciando a Trenecitos lentos y empalagosos. Volveremos a El Álamo en el Torneo Nacional de Mayo, sin arriesgar la ilusión y el prestigio, para competir con los mejores, en Alevín, Benjamín, Prebenjamín y Chupetín, y poder saludar escudos mayores, bordados, Rayo, Benfica, Real Madrid, Atleti, Milán, Málaga..
OTROS REYES.
El ejercicio de romanticismo sin título en una final, la derrota sin llanto, lo agarramos del Benjamin “C”, que luchó contra Molinos de Viento y Caballeros Gigantes en Mora, en el Torneo de Reyes, donde fueron merecedores de algo más que la derrota, 1-0, ante el Mora CF. “A”. Los balances de las finales no admiten tonos grises, o blanco o negro, alegre o extraña, pero sí son permisivos aunque no ganes, en la brillantez, y el equipo de Raúl durante el torneo fue todo un maravilloso destello. Mañana sereis.
El Cadete “B” hizo un ejercicio extraordinario de supervivencia en el Torneo de Reyes de Seseña, esquivando rachas de viento y otras inclemencias físicas. El mérito de éstos tíos no está en los resultados en sí, (cinco partidos, tres ganados, uno empatado y uno perdido), sino en su actitud, Alberto guía mediante, reflejada en todas las disputas del balón, de un equipo que justifica su orden en cada una de las acciones de un partido, compartiendo emociones dentro y fuera del campo. Comerse el mundo con esa edad.
El partido amistoso del Cadete Regional, ante el Atlético de Madrid “C” se afeó por el temporal, que condicionó las aptitudes técnicas y tácticas al “Yo más que Tú” en imprecisiones. Ganamos nosotros, 0-1, porque en el segundo tiempo llegamos más veces a su área, sorteando al peor rival posible, el viento, y porque fuimos mejores, y porque buscamos el gol con más insistencia, arrebatos aparte.
Día de Reyes, Odelot mismamente.
