EL MÉTODO MORENO. (16-JUNIO-2013)

Derrota del Benjamín A en la Final de Villaseca, ante el Seseña A, 4-1, que nos superó a balón parado, pues dos de sus goles llegaron en dos faltas que materializaron extraordinariamente. El resultado es excesivo, pues los nuestros no estuvieron tan lejos en juego, en un partido flojo de calidad, como suelen ser éstas finales, condicionadas por los nervios y la excesiva responsabilidad. Ser subcampeón en una liga tan competitiva es un triunfo, y más si tenemos en cuenta que somos el equipo más laureado del campeonato, con cuatro títulos, y con más finales que nadie. Diego Alcázar, segundo máximo goleador, y Alfonso Jiménez, nombrado uno de los tres jugadores más valiosos del campeonato, fueron la clara representación del resto de compañeros, que son los mejores aún sin ganar la final, pues su detalle de personas grandes con su entrenador, Jose Moreno, es un reflejo de las grandes personas que les cuidan en casa. El gesto final de deportividad con el pasillo y felicitación personal al rival cuando subió al podio, disparó muchas emociones y levantó carnes de gallina. Método Moreno. Sello Final Gallego. Nuestra grandeza está también en saber cuidar estos detalles, demostrando que los valores humanos no se demuestran con palabras escritas gratuitamente “on-line”, y sí con gestos con sentimiento como éstos. Ser competitivos es también saber abrazar entre lloros al rival que nos ha ganado. Identidad Odelot Toletum. 

 El Cadete A quedó eliminado del I Campeonato de España Copa Coca Cola, tras perder sus dos partidos, el primero de forma oscura, el segundo sin discusión alguna. El Águilas de Murcia nos ganó 2-1 porque no tuvimos suerte con el arbitraje. Colgarse un silbato al cuello y amarrar el mango de un banderín no te asegura que estés preparado. La banda del juez de línea que marcaba nuestro ataque se le hizo larga, su carrera cochinera en cada cambio de orientación le desnudó, y como no llegaba a tanta agitación, se le soltó el muelle del brazo, y parecía un aparcador de aviones con su bandera. Nos birló dos goles por fueras de juego imaginarios que no llegó a ver porque cuando él iba, con la lengua fuera, los jugadores frescos, ya volvían. Acabó el partido con el rostro desencajado, pobre, y quizá le debieron dar un paraguas en lugar de un banderín. Cuídate, macho, que eres muy joven. El Villarreal en el segundo partido nos ganó bien, 6-1, superándonos  en físico, en calidad y en moral, pues ellos se sabían ya clasificados, y nosotros teníamos que obrar un milagro. No pudo ser porque ellos son muy buenos, buenísimos, equipo superior. Los nuestros cumplieron ya al lograr su pasaporte a Villarreal, siendo los mejores de Castilla La Mancha, y se guardaron para el resto de sus vidas, una experiencia inigualable. Enhorabuena y gracias a todos, madres, padres y demás familia, y sobre todo a los jugadores, que deben disfrutar del merecido descanso como extraordinarios guerreros que son.

Despedida expléndida del Prebenjamín A aunque perdiera la Final del Torneo ADU Carrascal de Leganés en penaltis. Acabó sin perder ningún partido, y empatando la final 1-1, con el equipo anfitrión, al que se le dio un empujoncito para que la copa se quedara en Madrid. Nuestro equipo deslumbró a todos con sus números y con su juego. Con seis partidos jugados en el torneo, cinco ganados y uno empatado, 25 goles a favor, y 3 en contra, se pueden volver todos orgullosos para Toledo.