En la Escuela de Fútbol de Odelot Toletum tenemos fútbol aunque sea Navidad. Apuntaba a partido menor, por las fechas que son y porque no había puntos en juego. Y terminó por ser un partido de enorme interés, hasta el punto que la emoción del juego y del resultado, eliminó muchos ardores de estómago, producidos estos días por mazapanes y turrones. Compartimos la mañana con nuestros amigos de la Escuela de Fútbol del Real Sitio, y allí el Infantil B fue campeón del Trofeo Navidad, ganando 1-2, al Real Aranjuez B, en un partido que podríamos haber resuelto en el primer tiempo, si hubiéramos aprovechado las tres claras ocasiones de gol que tuvimos. Sergio Álvarez anteriormente sí aprovechó las suyas, marcando dos goles que nos dejó el marcador cero a dos. Un gol en el último segundo del primer tiempo de los ribereños nos iba a dar la satisfacción de un disfrutar de gran segundo tiempo.
Los entrenadores de ambos equipos, nuestro Valentín, y el del Real Aranjuez, Fermín, fueron atrevidos y decidieron que nos diviertiéramos ofreciéndonos un partido de ida y vuelta. Fútbol dinámico y ordenado desornedamente, velocidad de vértigo que nos permitía ver el balón en un área, y a los diez segundos en el otro. Las ocasiones de gol iban y venían, y con semejante inercia emocional el partido nos condujo a una sensación dividida, el deseo de los de Aranjuez de que el partido se alargara para intentar al menos el empate, y el nuestro que nos hacía dudar si pedir la hora, o plantearle a los contrarios aquel viejo desafío que hoy aún funciona: El que meta gol, gana. Con entrenadores, jugadores y público gritando y presionando, llegamos hasta el pitido final, cuyo sonido nos invitó irresistiblemente a estrechar las manos de los deportivos rivales, intercambiando con ellos también, sonrisas en el descenso de adrenalina.
Y por último, y por supuesto, no podemos dejar de felicitar a los nuestros. Al portero y su defensa (César Gómez, Javi Sanz, Luis Prados, Byron Del Cerro y Ángel Téllez), por su impecable trabajo. A los mediocampistas, (Dani De la Peña, Manu Laguna, Carlos Díaz, Miguel Chaves, Chechu Montañés y Alex López-Villalón) por el esfuerzo enorme en la labor de creación y destrucción, a los delanteros (Martín Lanchas, Sergio Álvarez y Quique Pérez) por mantener a raya a la rocosa defensa de los de Aranjuez, y agradecer a la vez a todos sus padres, (también a los ausentes que por diferentes motivos no han podido estar) el sacrificio desinteresado de regalar su tiempo para que pudiéramos disfrutar del fútbol de sus hijos un día más. Merece la pena. Por eso tendrán descanso hasta el día 3 de Enero. Se lo merecen.
Felices fiestas a todos, a toda la Familia Odelot, y al resto del mundo.