PARTIDO DE LA JORNADA
El paisaje era magnífico para un choque de la Liga Nacional Juvenil, césped natural mojado pero no encharcado. La puesta en escena era la ideal, con temperatura otoñal y dos conjuntos desahogados en la tabla clasificatoria. La categoría la demostraron después ambos equipos, con un inicio respetuoso por ambas partes, pero con una idea clara, la de dominar. Lo hizo el Tomelloso en el marcador a los diez minutos, algo que escoció a los nuestros y de qué manera, pues a raíz del gol en contra, se empeñaron en ser mejores. Y lo fueron. A falta de dos minutos para el descanso, Moisés encontró el premio del empate que tanto habían buscado, y en los primeros diez de la vuelta de vestuarios, Jorge González, y Moisés de nuevo, pusieron tierra por medio en el marcador, distancia que fue definitiva, 1-3, para el Juvenil A, en el que fue su mejor partido con diferencia en lo que va de liga, y que por fin consiguió plasmar en juego y en números, lo que la fortuna otras veces le negó, aunque siempre lo buscaron. Un paso adelante.
Partido de mareo, ir y volver, de área en área. de iniciaciones inmediatas y honduras kilométricas, la lluvia incesante, jugadores detrás de un balón que se montaba a veces en el mejor coche McLaren de Fernando Alonso, y otras se paraba en mitad de la carrera frenado por los charcos. No fue un encuentro exquisito, técnicamente hablando, pero sí un ejercicio de músculo, de pasión por el fútbol, esfuerzo heroico de los dos equipos, los amarillos del Polígono que fueron jabatos, y los naranjas del Juvenil B, que se dejaron el alma para llevarse merecidamente los tres puntos 3-2, sudando bajo la lluvia, con los goles de Serrano, Óscar, y el decisivo de Isaac. Otro paso adelante.
