TIRITONES Y OTROS ESCALOFRÍOS. (18-NOVIEMBRE-2012)

Mientras esperamos el frío, el invernal, el verdadero, gorros y guantes preparados, entre tiritones, nos frotamos las manos y los ojos al ver a nuestro equipo Chupetín jugando y ganando, esta vez por 0-18 al Deportivo Yuncos, víctima convencida. El estreno del Alevín E en su liga, Primera División, ha irrumpido con la frescura friolera del otoño, 0-4 al Ciudad de Talavera, aparte flores y demás combinaciones. Entre hermanos debutaron los Alevines A, B, C y D, y como buena familia al celebrar una cena conmemorativa, se abrazaron al acabar, sin echarse en cara quién había comido o bebido máS. Erre que erre sigue el Benjamín A, aunque nos silben los oídos, 3-4 ante el Mocejón B, ganando y aprendiendo todos, los que más lo valoran y los que menos lo necesitan. Y miguita a miguita, cual hormiguita, camina el Benjamín C, recogiendo puntos para el duro invierno, después de vencer 1-3 al Cobisa. Escudos a prueba de catapultas y espadas laser, pusieron alrededor de su porteria los chicos del Benjamin B, para terminar ganando justamente, 1-2 al Bargas. El Prebenjamín A derribó la fortaleza del Recas, 1-3, que nos lo puso difícil levantando una defensa ordenada ante su casa.

Derrota del Cadete B ante el Polígono, excesivo castigo, si mezcláramos en una batidora méritos, suerte y facultades de unos y otros. No es exagerado apuntar que el 5-0 final es tan sorprendente como lo hubiera sido un 2-7 a nuestro favor. El Infantil C empezó mejorando en fútbol, juego y pies, pero ausente en personalidad, 2-0 ante el Talavera, al no saber acompañar a su calidad futbolística algo de madurez. No nos alarmamos en absoluto, sabiendo que tenemos en este equipo calidad, para enseñar, y método, para dar y regalar. El Infantil B perdió 3-1 ante el Benquerencia porque algunos de los nuestros no consiguen desprenderse todavía, tres meses después, del bañador y la toalla, confundiendo balón, el de competición y el de playa.

No condicionó para nada que fuera un partido amistoso, ni tampoco que no hubiera puntos y gloria en juego, ni por supuesto que jugaran ante un equipo Cadete, no, nada de eso, sólo la mala fortuna impidió que el Infantil A ganara en Cobeja, porque si hablamos de juego, ocasiones y méritos, la victoria debería haberse vuelto con nosotros, quitando importancia al 3-1 final.

Una primera hora de partido intensa y dinámica con intercambio de golpes, excitaciones y agitaciones varias, nos dejó otra demostración de lo que es la Liga Regional Cadete. A esas alturas ya dominábamos al Miguelturra en el marcador, 0-1, que sería el resultado final, después de un gol de Christian, combinación y bomba inteligente de todo el equipo, Cadete A. Aplacados todos los sobresaltos del ir y venir a uno y otro área, supimos controlar y cerrar la tienda con la caja ya hecha, tres puntos más, hasta el pitido final, esperando la próxima jornada para combatir tiritones y otros escalofríos.